EL MITO DE PANDORA. Por Eva García Valero, María Elisa Pérez Sirvent y Marina Navarro Olmo.
Según el mito Pandora fue la primera mujer, como Eva en la religión judeocristiana. Hefesto, dios del fuego, la creó a imagen y semejanza de los inmortales, y tuvo la ayuda de la sabiduría de Atenea. Zeus ordenó su creación para castigar a los humanos, porque Prometeo había robado el fuego divino para dárselo a los hombres.
Cada dios le dio a Pandora una cualidad como la belleza, la gracia y la persuasión entre otras, pero Hermes (mensajero de los dioses e intérprete de su voluntad) puso en su corazón la mentira.
Según las leyendas había una jarra que tenía depositados todos los males. Al verla Pandora la abrió, escapándose todos los males por la tierra. Cuando logró cerrarla lo único que quedó fue la esperanza, que no llegó al mundo ni fue recibida por los humanos. De aquí viene la expresión "abrir la caja de Pandora". Aquí Pandora representa la perdición de la Humanidad al igual que Eva.
De acuerdo con otra versión la jarra atesoraba todas las cosas buenas, y Zeus se la entregó a nuestra protagonista para que la regalara a Epimeteo el día de su boda. Pero ella la abrió sin considerar las consecuencias, retornando todos los bienes al Olimpo, la morada de los dioses, dejando a los hombres rodeados de mal y con el único consuelo de la esperanza.
Epimeteo era hermano de Prometeo, que cuando engañó a Zeus para robarle el fuego sagrado estuvo seguro de ser castigado. Advirtió por ello a su hermano de los presentes de Zeus, pero Epimeteo al ver a Pandora no se resistió, convirtiéndose en culpable de las desgracias humanas.
Si Pandora no hubiera abierto la caja la Humanidad no hubiera sufrido tantas desgracias. Debemos pensar en las consecuencias antes de llevar a cabo una acción que nos pueda afectar negatívamente.