CIFRAS CON HISTORIA. La distribución de la población europea hacia 1453.

06.11.2016 12:33

                

                Para mediados del siglo XV los historiadores ya disponen de una serie de recuentos fiscales por hogares o fuegos en distintas regiones de Europa, que les permiten establecer con todas las precauciones unos primeros umbrales de población de muchos de sus reinos.

                Tras la expansión de la Plena Edad Media, los pueblos del continente entraron en una larga fase de dificultades. La peste y otras enfermedades los castigaron regularmente desde 1348. Hoy en día se prefiere hablar más de estancamiento que de retroceso entre los siglos XIV y XV.

                Al igual que hoy en día, la población se distribuyó de manera desigual. El Sacro Imperio Romano Germano disponía de 10 a 12 millones de habitantes, pero Francia era la tierra más poblada de Europa con un máximo de 18 millones, lo que explica en parte la potencia de su Monarquía y sus aspiraciones de grandeza. Su riqueza agraria estuvo en la base de ello.

                Los efervescentes reinos hispánicos de la Península solo alcanzaron un máximo de 6 millones e Inglaterra a duras penas alcanzó un poco menos de los 3.

                La brillante y dividida Italia del Renacimiento estuvo poblada por un máximo de 9 millones.

                Los Países Bajos y Suiza ya tenían una alta densidad de población para su tiempo con 1.500.000 y 650.000 habitantes respectivamente. Los grandes mercaderes flamencos y los mercenarios suizos no salieron de la nada.

                En cambio los territorios de Escandinavia solo estuvieron poblados por un máximo de 2 millones. Su importancia en el concierto europeo sería discreta.

                Más inseguras si cabe son las cifras manejadas para la Europa Oriental. Carecemos de noticias ciertas sobre Rusia, pero se considera con fundamento que el histórico reino de Hungría tuvo 4 millones de personas y el de Polonia unos 3 como mucho. Se ha cifrado el número de habitantes de la península Balcánica, afectada por el avance otomano, entre 4 y 6 millones.

                Con tales números iniciaron los europeos la competitiva Edad Moderna, en la que a veces la energía de unos pocos desbordó a muchos más.

                Remedios Sala Galcerán.