27.11.2024 15:41
“En caso que se considere firme la paz entre los dos países, el mensajero (Bonafonat de Sant Feliu) influirá con todo su poder para que dicho rey (de Granada) guerree y haga guerrear a sus reinos y tierras contra dicho rey de Castilla y sus gentes y contra todos los enemigos cristianos del señor rey (de Aragón) por mar y por tierra, y puede inducir dicho mensajero al dicho rey de Granada a efectuar guerra contra el rey de Castilla porque, dado que el rey de Aragón con grandes fuerzas de Francia, de Inglaterra y de Alemania le hará guerra por esta parte y sus gentes deben entrar en Castilla en breve, dicho rey de Granada a su vez podrá hacer dicha guerra con gran ventaja.
“Que si el señor rey (de Aragón) quiere tener compañías de a caballo y a pie de dicho rey de Granada, que los pueda tener a su sueldo para perjudicar a dicho rey de Castilla y a sus gentes. Prometiendo igualmente dicho mensajero de dicho rey (de Aragón) que de forma semejante pueda tener compañías de a caballo y de a pie a sus expensas.
“Y que por parte de dicho mensajero se garantice que en las ligas y convenios que haga con dicho rey de Granada prometa que el señor rey (de Aragón) no dé ayuda en dinero ni en otros socorros, sino por sus dineros, e igualmente que el señor rey (de Aragón) obtenga del dicho rey (de Granada) dineros y otros socorros, sino por sus dineros para que la igualdad sea mantenida.
“Que dicho mensajero puede otorgar a dicho rey de Granada hasta diez de sus galeras en caso que las necesite el señor rey, pero pagando mil doblas de oro por sueldo de cada galera cada mes.”
Fernando Díaz-Plaja, Historia de España en sus documentos. Siglo XIV, Madrid, 1992, pp. 145-146.
Selección de Víctor Manuel Galán Tendero.
